Nadie nos enseña a ser padres. Uno hace lo que puede con lo que sabe, repitiendo lo que nuestros padres nos enseñaron, un poco de los libros, otro poco de lo que familiares, amigos o médicos nos dicen o aconsejan. Como papá tienes que ir descartando lo que no te funciona y asimilando lo que sí.

Hoy quiero hablarte de cómo el silencio (lo no dicho) y la mentira le hacen más daño a tu hijo que cualquier verdad.

Talvez no siempre sabes qué responderle a tu hijo cuando hace ciertas preguntas que son penosas, dolorosas, indiscretas o secretos familiares. Talvez no sabes cómo comunicarle algún suceso importante. Aquí te quiero dar algunos consejos de cómo puedes manejar estas situaciones más fácilmente y explicarte por qué es importante no mentir, no quedarte en silencio y mandarle mensajes confusos a tu hijo.

Hay muchos temas que son difíciles de abordar:

  • Sexualidad
  • Muerte
  • Suicidio
  • Adopción
  • Separación
  • Nacimiento de un hermanito
  • Enfermedades

CONSEJOS para cuando tu hijo te pregunta algo

ESCUCHA con atención la pregunta de tu hij@. A veces nos asustamos por la pregunta que hacen y nos adelantamos haciendo suposiciones y no escuchamos lo que realmente están preguntando.

 

 

 

RECTIFICA su pregunta para ver si la entendiste bien. Pídele que te explique un poco más de su duda. (Esto es fundamental para entender a dónde va dirigida la pregunta)

 

 

 

PREGÚNTALE por qué quiere saber eso.

 

 

 

 

 

 

RESPONDE de forma específica a su pregunta pensando en:

– SU EDAD. La misma pregunta no se responde igual a un niño de 5 años a un niño de 8años.

– SU VOCABULARIO- usa el vocabulario que él suele usar: simple y sencillo.

– LAS COSAS QUE YA SABE: retoma algún cuento, canción o evento pasado que ya se le haya explicado.

NO SÉ: se vale decir que no sabes si es que realmente no sabes la respuesta, y decirle que vas  a investigar. NO olvides responder a su pregunta cuando ya tengas la información.

 

NO TE ASUSTES: el niño nota cuando uno está nervioso, ansioso o preocupado por su pregunta y puede pensar que es malo preguntar o hablar del tema.

 

DOS EJEMPLOS

ESCUCHA: Tu hij@ te pregunta: ¿Qué hacen tú y papá en la noche en su cuarto?

RECTIFICA: ¿A que te refieres? Niño: “Ayer te escuché gritando, ¿estás bien? Pensé que papá te estaba lastimando.” (Te das cuenta que el niño está preocupado y su pregunta está más enfocada a asegurarse que estás bien que a otra cosa.)

PREGUNTA: ¿Te preocupaste? ¿Te dio miedo? –  Tu hijo te dará una respuesta positiva o negativa.

RESPONDE: “No tienes por qué preocuparte, papá no me va a lastimar. A veces uno grita también cuando está feliz, emocionado o cuando nos gusta algo.”

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ESCUCHA: Tu hija te pregunta: ¿Cómo hacen pipí los niños?

RECTIFICA ¿A que te refieres? – Niño: “Si hacen parados o sentado.” (Aquí ya te está explicando su duda).

PREGUNTA ¿Por qué tuviste curiosidad de esto? Niño: “Porque mi amiga me dijo que su hermano hace sentado, pero yo he visto que papá hace parado” (Aquí su duda no es en cuestión al sexo de los niños y niñas sino a desmentir lo que su amiga le dijo y entender que hace papá)

RESPONDE: “Los niños hacen pipi parados normalmente, cómo tú has visto a tú papá pero también pueden hacer sentado, como el hermano de tu amiga. De las dos formas está bien.” ¿Tienes alguna otra duda?

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CONSEJOS de cómo explicarle algún suceso o información importante

TIEMPO: Tienes que encontrar el momento adecuado. Cuando tú te sientas tranquil@ y hayas asimilado la situación y estés list@ para contar lo sucedido. (muerte, suicidio, adopción, enfermedad, separación).

EDAD: Por más pequeño que sea tu hij@, si ya sabe hablar y comunicarse, tienes que explicarle lo que está pasando.

VOCABULARIO: Usa el vocabulario que él usa, entre más pequeño más simple tiene que ser la explicación.

PREGÚNTARLE: Al terminar tu explicación. Pregúntale si entendió y si tiene alguna pregunta al respecto.

Recuerda: SIEMPRE es mejor decirle la verdad, por más dolorosa o difícil que sea.

EXPLICACIÓN

  • Lo no dicho (el silencio): Cuando tu hijo te pregunta algo y no le das ninguna respuesta, la evitas o te quedas en silencio por miedo a lastimarlo, asustarlo o porque crees que todavía no está “en edad” para saberlo, lo único que estás provocando es que se angustie y empiece a distorsionar la realidad. No porque tu no le respondas no significa que en su mente desaparezca esa inquietud, al contrario, crece.

“Lo que no sabe, se lo inventa”: Eso pasa en la mente de tu hijo.  Los niños tienen una imaginación muy fantasiosa y se empiezan a crear historias, fantasías que muchas veces son más exageradas y terroríficas que la realidad o simplemente erróneas.

Ejemplo: Si tu hijo te pregunta ¿Qué hacen papá y mamá en la recámara en las noches? Y tú te quedas callado – el niño puede empezar a imaginarse cosas malas, peligrosas y empezar a tener miedos nocturnos o pesadillas. O puede empezar a imaginarse que hacen cosas súper increíbles y lo excluyen, estás fomentando sus sentimientos de celos y exclusión.

  • La mentira: Hay veces que uno no sabe que responder o cómo abordar un tema. Hay temas difíciles de hablar como una muerte o suicidio cercano, una enfermedad o una adopción, pero es muy importante que lo hagas. Aunque no parezca los niños entienden y se dan cuenta de todo, perciben que algo anda mal o que se les está ocultando algo. Como papá entiendo que quieras proteger a tu hijo de todo lo feo que hay en el mundo y quieres que sea feliz, pero al ocultarle o mentirle no lo estas ayudando a enfrentar la realidad y poder entenderla.

Recuerda: SIEMPRE es mejor decirle la verdad a inventarte cosas. Lo importante es CÓMO se lo digas

Ejemplo:  El suicidio de uno de los padres.

Hay que decirle al niño que papá o mamá decidió quitarse la vida, que fue algo que él/ella hizo porque no sabía cómo enfrentar ciertas emociones, pero que no es la forma correcta. Que no lo hizo por culpa de nadie, que fue su decisión. Que por eso es importante hablar las cosas, ir con terapeutas y pedir ayuda.

“Tu papa/mamá estaba muy enferm@. No era una enfermedad del cuerpo sino de la cabeza (mente). Los doctores ya no pudieron ayudarlo y él/ella no supo cómo curarse de esa enfermedad. Ahora ya no está con nosotros, pero siempre nos quiso y nosotros a él/ella. No es culpa de nadie.”

¿ Cúando acudir a terapia?

Si sientes que tu hij@ no está procesando algún suceso importante o lo ves deprimido, angustiado o diferente no dudes en acudir con algun terapeuta. Si como papá no te sientes preparado para hablar sobre algún tema nosotros con gusto te ayudamos. Ponte en contacto con nosotros y te agendaremos una cita.